¿Debemos renunciar a uno de los más nutritivos alimentos dentro de la naturaleza, la carne roja, por temor a que puede causar serios problemas de salud como enfermedades cardíacas y el cáncer?
Después de una revisión sistemática de los hallazgos científicos clave en relación a un posible vínculo entre el consumo de carne y la causalidad del cáncer, un grupo de expertos del Fondo de Investigación Mundial del Cáncer y el Instituto Americano para la Investigación del Cáncer concluyó, en 2007, que “la roja o las carnes procesadas son fuentes convincentes o probables de algunos tipos de cáncer”. Debido a estos hallazgos, la carne roja ha sido durante muchos años recibido con mala reputación. Si bien muchos expertos médicos están de acuerdo con estos estudios a la vez que sobre el consumo de carne roja como un indicador de enfermedad cardiovascular futura en los que participan periódicamente en ella, muchos de los que comen carne como parte de una dieta equilibrada saben mejor.
Dejando a un lado las prácticas culinarias seguras y cortes con un contenido de grasa saturada excesivamente alto, la carne roja podría ser considerado como un súper alimento para las poblaciones atléticas. Además de contener valiosa hierro para aumentar los niveles de energía, la creatina para mejorar la construcción de músculo, y proteínas para ayudar a la reconstrucción celular. Nunca se ha demostrado que su consumo entre las personas conscientes de la salud fuese a causar problemas de salud (muchas de las personas que se alistaron en los estudios mencionados pudieron haber tenido múltiples factores de riesgo para la salud no asociados). “Caloría por caloría, la carne es uno de los alimentos más ricos en nutrientes”, dice Shalene McNeil, PhD, director ejecutivo de investigación de nutrición de la Asociación de Ganaderos Nacionales.
Añade que una porción de 3 onzas de carne de res magra proporciona tan sólo 180 calorías y, como un bono adicional, 10 nutrientes esenciales. “La gente no tiene que renunciar a la carne roja”, dice Georgia State University nutrición profesora Christine Rosenbloom, PhD, RD. “Tienen que hacer una mejor selección en el tipo de carne que consumen y las partes.”
La implicación aquí para nosotros los lectores está enfocado hacia la salud, no se trata tanto de evitar por completo el consumo de carne roja, pero para comer cortes magros ha de ser con moderación y como parte de una dieta equilibrada.
Referencia E, Lee. WebMD. La verdad sobre la carne roja. [Online] recuperado el 01/02/12.
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